Amenazada por opinar a favor de la Ley Antitabaco.

Me han invitado a acudir a la Manifestación contra la Ley Antitabaco, y he dejado un mensaje respetuoso explicando por qué no voy a ir y por qué pienso que no debe celebrarse dicha manifestación. Acabo de recibir una llamada telefónica desde un número oculto, insultándome por opinar. Yo sé que esta ley ha molestado a mucha gente, comprendo que es muy molesto tener que salir fuera para encender un pitillo. Lo que me da más rabia es la inversión de muchos locales que fueron adaptados para que pudieran convivir fumadores y no fumadores (cosa, creedme, IMPOSIBLE sin que se sacrifiquen los NO fumadores, y es injusto que se tengan que sacrificar precisamente los que no tienen el vicio). Pienso que NUNCA debería haberse obligado a los locales a un gasto que ha resultado ser inútil. Eso es una PUTADA. Pero lo que pienso sobre la manifestación y la ley antitabaco se mantiene, y la reproduzco aquí, esperando que opinar respetuosamente no signifique ser insultada o amenazada por algún perturbado:

Ir contra la Ley Antitabaco sería como ir contra el derecho al voto de la mujer, contra el derecho de los niños y de toda la gente a vivir, comer, ver la tele, leer o divertirse en un ambiente sano y sin peligro para su salud. Derogar esa ley es ir hacia atrás, retroceder en un derecho ya conseguido. ¿Alguien votaría a favor de que levanten la prohibición de mear en la vía pública? Pues investigad la polvareda que se alzó cuando se prohibió. Los meones públicos no se podían creer que se prohibiera algo así. Reflexionad un poco. Soy solidaria con el sufrimiento de los fumadores porque no pueden satisfacer su terrible vicio cuando y donde quieren, y se ven obligados a controlarse por el bien de los demás. Pero los que vayan a esta manifestación no son solidarios con los demás. Si después de reflexionar, aún pretenden ir, ¿de verdad pueden pedir respeto?


Va a ser que no.
Así que a quien esté de acuerdo conmigo, le invito a opinar sobre el tema. Pero le advierto que a mí me está costando caro.